El Comedor Social San Juan Bautista – testimonio de un Voluntario
Ayer por la tarde estuvimos en el comedor social que sirve la Orden de Malta España
No niego lo difícil que es describir, cada vida, cada mirada de las personas que acudían a comer.
Miradas que expresan una «dureza» de vida, una lucha por la supervivencia, mujeres, hombres, niños, niñas, ancianos, de todas las nacionalidades, religiones… el ser humano «necesitado» en estado puro.
Más de 280 servicios de comida, más de 280 personas que han comido ayer, y podrán comer hoy, mañana, pasado mañana… tienen asegurado «el pan» con esta organización. Pero hay días que sobrepasan las 400 personas … y no fallan, siempre hay un plato caliente para quien acude.
Y ahí están los «voluntarios», personas que ponen su corazón, su trato de respeto, cariño… y que como dicen ellos, se llevan la mayor recompensa, una sonrisa, un gracias,
Ayer vimos cientos de sonrisas, cientos de agradecimientos «puros», cientos de personas que saben que en su vida no están solos, porque esta organización se preocupa de ellos, ya no sólo con el comedor, sino con su centro de salud, su ropero, sus duchas…. acción dese la humildad y vocación de servicio desinteresado.
Esta es la historia de una realidad por y para el ser humano desvalido, esta es la historia de la Orden de Malta.
